LA MOTIVACIÓN ESENCIAL DE LA GUERRA

En la nota anterior(1) afirmábamos que sólo un accionar orientado a impedir la continuidad del conflicto por parte de actores con el suficiente peso internacional, podía evitar las nefastas consecuencias de la guerra mundial que estamos comenzando a padecer. Asimismo, nos preguntábamos si nuestra “Tierra en Florecimiento” Americana o “Abya Yala”, podría jugar algún papel en este accionar. Para contestar adecuadamente esta pregunta, debemos definir previamente y con extrema claridad, cual es la motivación básica o esencial de esta guerra. Porque sólo conociéndola, podremos contrastarla con las motivaciones centrales de Abya Yala, y avanzar luego sobre cuál puede ser el papel que ésta juegue y qué camino debe seguir para jugarlo. Esto es lo que iremos tratando en las próximas notas.

Si bien la motivación de toda guerra es, en general, imponer al contrincante la voluntad propia, dicha voluntad tiene, en cada guerra particular, significados y propósitos diversos. Desde ampliar el territorio, hasta imponer una religión, pasando por adueñarse de ciertas rutas comerciales, incorporar regiones a un imperio, o múltiples objetivos más. Tales propósitos están conectados no solo con las situaciones materiales de los contrincantes sino, fundamentalmente, con los valores y principios lógico significativos que poseen, es decir, con sus culturas; ya que son estos marcos mentales colectivos, aquellos desde donde se definen los fines que se persiguen. De manera que para identificar la motivación esencial de la guerra mundial que está desplegándose, resulta imprescindible además de repasar las situaciones materiales de los involucrados, entender los valores y principios lógico significativos desde los cuales, cada adversario, se plantea las finalidades a conseguir.

La civilización moderna en la que está inmerso el planeta – como hemos explicado en una nota anterior(2) – tiene como uno de los elementos centrales de su núcleo lógico significativo, la convicción en el “Progreso”, que implica el incremento constante e ilimitado de bienes. De dicha convicción surge la necesidad ineludible de hacer crecer la economía, ya que sin tal crecimiento resultaría imposible el incremento de bienes. Consecuentemente, el crecimiento económico se constituye en una motivación ineludible de prácticamente todas las actuales sociedades mundiales; imaginemos por un momento lo que sucedería con un dirigente que proponga eliminar el crecimiento económico de su país y tendremos una idea aproximada de la profundidad con que este objetivo está arraigado en la sociedad mundial actual. Con respecto a la guerra en curso, es justamente el crecimiento de su economía lo que Occidente ve amenazado, así como aquel que tanto China como Rusia aspiran a lograr. De manera que la motivación esencial de esta guerra por parte de cada uno de los contendientes, es asegurar su crecimiento económico.

Ahora bien, ésta motivación resulta actualmente bastante complicada, porque se registra en un contexto material y mentalmente limitativo, cuando no directamente opuesto, a dicho crecimiento. Veamos esto con más detalle.

La creciente escasez de materiales básicos y fuentes de energía baratas, necesarias para seguir produciendo cada vez más bienes, es uno de los componentes claves de ese contexto limitativo. La necesidad de eliminar procesos productivos generadores de dióxido de carbono para reducir el calentamiento global y la acidificación de los océanos, es otro. La exigencia de suprimir gran parte de los desarrollos agroganaderos industrializados – que constituyen la base de los actuales sistemas económicos – a efectos de paralizar la destrucción de especies animales y vegetales, e intensificar sustancialmente la biodiversidad, es un factor limitante más. La financierización de la economía con su consecuente desinversión productiva, así como los imprevisibles efectos de la crisis contemporánea de las estructuras financieras especulativas – que recién estamos comenzando a observar – constituye un elemento restrictivo adicional. La extensión, magnitud e impacto de los cuatro factores mencionados en la economía mundial, limitan materialmente de modo muy significativo, las posibilidades de un crecimiento económico continuo en los años por venir.

Por otra parte, los cuestionamientos a la convicción central de la civilización moderna, según la cual el incremento constante de bienes es necesario para seguir existiendo como humanidad, configuran ya en el presente una limitación mental colectiva, creciente y cada vez más sólida, a la motivación del progreso y del crecimiento económico. De hecho, estos cuestionamientos están surgiendo desde las mas diversas disciplinas científicas, filosóficas y éticas, así como desde las cosmovisiones mas diversas. La aparición y difusión masiva de estas críticas, está haciéndola entrar a la civilización moderna en una crisis cultural incuestionable. Lo cual va más allá de una limitación mental a la motivación del crecimiento económico, en que se funda esta guerra, para convertirse en una verdadera oposición a la civilización creada por Occidente hace varios siglos.

Es decir, la motivación esencial de esta guerra que, como su nombre lo indica, mueve las diversas acciones de sus contendientes, se encuentra en un contexto de obstáculos y limitaciones tanto materiales como mentales tan fuertes, que difícilmente pueda continuar siendo por mucho tiempo una motivación colectiva dominante y activa. Lo cual no sólo complicará la dinámica de la guerra de forma difícil de prever. También abrirá la posibilidad de que otras motivaciones, ligadas a otros principios y valores lógico significativos, empiecen a cobrar realidad en diferentes sociedades y conjuntos sociales de la humanidad; jugando no solo un papel importante en su futuro mediato, sino que incidirá en el desenvolvimiento inmediato de las acciones guerreras. Desde esta perspectiva analizaremos la participación de nuestra “Tierra en Florecimiento” Americana o “Abya Yala”, en la detención de la guerra mundial en curso.

Lic. Carlos A. Wilkinson

(1) NOTA 113 “UN MUNDO EN ESTADO DE GUERRA II” Marzo 2023 https://chevosquiensos.wordpress.com

(2) NOTA 72 “LA AGONÍA CIVILIZATORIA II” Mayo 2020 https://chevosquiensos.wordpress.com